Nuestro querido Señor dice ahora, "Hijo mío, ama a los demás como yo te amo a ti, porque lo menos que hagas por tu hermano, lo haces por mí.
Y como este campo de trigo, el amor se multiplica en caridad, en verdad y comprensión, compasión, sabiduría, paciencia y alegría. El amor se multiplica de muchas maneras diferentes cuando lo ofreces a un alma necesitada y a través de mi presencia, para ser las manos y los pies de tu Señor, los ojos de tu Señor para tus hermanos y hermanas.
Venid a mí y dejad que os ame y os lleve a mi Cruz de amor, porque la Cruz es amor, y el amor es la Cruz. Es el camino de mi misericordia y esperanza para mis hijos hasta donde los llamo para que se arrepientan y me reciban.
Mi querido hijo, ofréceme cada día tu corazón en el amor y a tus hermanos y hermanas, y no te olvides de reconocer mi presencia en ellos, de renovar tu paz y de renovar tu alegre esperanza dando.
Te quiero y siempre estoy contigo".