"Yo estoy contigo. Entrégame tu corazón. Entrega tu corazón a la alegría de mi amor. Abre tu corazón a mi misericordia y a mi paz. Y déjame cantarte una nueva canción de los verdes campos de esperanza de la dorada cosecha de mi amor.
Sí, hijo mío, déjame dar descanso a tu corazón. Descansa en la gloria de todo lo que es bueno.
Sí, déjame llevarte a los campos de la gloria del amor del cielo, donde tu corazón se unirá a mi corazón, donde cantarás la fuerza de mi amor.
Sí, sí, mi corazón clama misericordioso por tu amor y por el amor de todos mis hijos. Ven ahora, amor mío. Ven y descansa entre mis brazos de luz. Yo soy la luz y soy la bondad del amor eterno y la compasión por tu alma.
Reza, reza cada día por un mayor amor dentro de tu corazón y por la paz en todo el mundo, un amor por Dios y por tus hermanos y hermanas para que puedas ser el rostro compasivo de tu Señor Jesús para los demás.
Entonad un nuevo canto de amor y que mi misericordia siga derramándose sobre el mundo entero".