"Mi querida hija, deseo hablarte hoy de mi Iglesia, necesitada de curación, necesitada de oración por la unidad de mi cuerpo entre los sacerdotes, los cardenales y mi elegido el Papa Francisco.
Los corazones de los sacerdotes están a menudo dispersos y rotos por el peso de cumplir con el sacramento santo y eterno que han elegido, y han hecho una promesa, para servir a los corazones de mis hijos y para servir a mi corazón eterno de la Iglesia.
Sí, mi querida hija, reza por la sanación de los corazones de mis sacerdotes y la unidad entre ellos, para que la Iglesia pueda servirme con una sola visión según mi voluntad en el cumplimiento de mi mensaje evangélico para los corazones de mis hijos, para los corazones de todo mi pueblo.
Sí, ruega por la curación de los corazones de mis sacerdotes para que crezcan en la fuerza de cumplir su santo sacramento en mi amor, y sólo en y por mi amor, para que sus corazones permanezcan puros, como niños, en mis gracias y bendiciones que los restauran cada día por el poder de mi presencia en la Sagrada Eucaristía.
Sí, mi querida hija, es a través de la Sagrada Eucaristía, mi presencia de amor en los corazones de mis hijos, que sostengo mi Santa Iglesia. Llamo a todas las almas a recibirme en la Sagrada Eucaristía, a volver a mí en la Sagrada Eucaristía, y a llenarse de la luz y del poder de mi Espíritu a través de la Eucaristía, mi Espíritu que formó la Iglesia, y la mantendrá siempre unida y sostenida en mi amor.
Sí, mi querido hijo, los corazones de mis sacerdotes están rotos y debes rezar por aquellos que están más necesitados de mi misericordia para sanarlos y transformarlos cada día a través del poder de mi amoroso sacrificio y redención por las almas.
Te amo, mi querida hija, te amo. Une cada día tu corazón a mí en el santo amor de mi Cruz".
"Para que no haya discordia en el cuerpo, sino que los miembros se preocupen los unos por los otros. Si un miembro padece, todos a una padecen; si un miembro recibe honra, todos a una se gozan. Vosotros sois el cuerpo de Cristo e individualmente miembros de él".
1 Corintios 12:25-27