JESÚS: Siempre estoy con ustedes. Habla con el Padre Dan sobre este asunto. Confiando en mí en las pequeñas cosas, en las cosas sencillas de la vida, puedo guiarte hacia mayores medios de confianza. Habla con el Padre Dan sobre este asunto y tómate el tiempo de meditar sobre estas palabras para que pueda guiarte en la bondad de mi bondad en todas las cosas. Donde estés ciego, procura, como el ciego, ver. Quiero que todo tu corazón se vuelva puro. Quiero vivir en el corazón de tu pasión para mantenerte firme en la fe.
Puedo sanar cada área de tu corazón en la fe confiando en mí para hacerlo. Quiero que tu corazón florezca en la fe. Deseo que tu corazón se convierta en una institución de fe para los demás. ¿Sabes lo que significa una institución? Significa amar y servir siempre a mi corazón de tal manera que inspire a otros con gran esperanza en mi amor.
Cada día debes levantarte para buscar hacer lo que es bueno y honesto. No temas buscar la alegría de la luz de la fe para calentar tu corazón con amor. Mantente firme en la alegría de la fe para vigilar y proteger a los necesitados. Te quiero. Yo te amo a ti. No temas amarme hasta el sacrificio. Vivamos nuestras vidas juntos en el amor, firmes por todo lo que es bueno. Confiando en mi sacrificio para amarte.
Deseo que llames a tus tíos en las Bahamas. Ahora son mayores y necesitan más tu amor. Te he dado los medios para viajar. Usa estos medios sabiamente en todo lo que sea bueno. Estoy presente para ayudarte.
Ven a mí, mi amor. Te amo y estoy siempre contigo. Abre diariamente tu corazón a la luz de mi presencia. Toma mi mano y ponla dentro de tu corazón para que pueda tocarte con la herida de mi pasión para ungir las almas con mi preciosa sangre de santa paz... Sí, ven y toma mi mano y volemos en la alegría de la paz para siempre. Procura estar siempre conmigo celebrando las alegrías de la vida, el milagro que se te ha dado.