"Hijo mío, entrega tu amor a mi corazón como tu buena madre de amor y yo te tomaré de la mano y te guiaré cada día para ofrecerte la misericordia de mi hijo Jesús".

'Sí, querida madre, pido perdón por mis pecados y los del mundo entero'.

"Mi querido hijo, que la luz eterna de la misericordia de mi hijo te abrace y te guíe en su amor. Permítenos llevarte a nuevas alturas de amor en este día para cumplir todas las cosas con alegría y gratitud por las bendiciones que Dios te ha dado.

Os amo y estaré siempre con vosotros. Alegraos, os digo, alegraos en aquel que dio su vida para el perdón de los pecados y la redención de todos los hijos de Dios."