"Mi querido hijo, canta una nueva canción de esperanza y deja que mi gloria viva dentro de ti.

Sí, canta a la esperanza por tus hermanos y hermanas, especialmente por los que sufren y están muy necesitados. Ruega por la eterna misericordia de mi Cruz y redención para que ilumine el camino de la esperanza dentro de sus corazones volviéndose a su Salvador.

Reza para no dar por sentadas las bendiciones de mi corazón que te doy, siempre buscando y preguntando cómo puedo hacer más para amar y servir a mi Dios.

Sí, sólo hay un camino y es el camino del sendero de la Cruz que es la alegría y el amor por el propio corazón."

Señor mío, dice el Salmo 150, que alabe al Señor todo lo que respira. Te alabo por tu misericordia. Te alabo por tu amor. Que la esperanza de tu amor llene hoy la tierra, que la luz y la paz caigan sobre nosotros para tu gloria'.