Señor mío, estar aquí contigo en la belleza de esta noche es el mayor regalo de amor, porque tú eres el amor eterno. Tómame, mi Señor, como deseas consumirme en la melodía de esta noche que es una nueva canción de amor para que la canten tus hijos, una nueva canción'.

"Sí, hija mía, te he llamado para que seas una luz. A cantar un cántico nuevo, a ser luz para las naciones y a ser esperanza para mis hijos en el don de la esperanza que te doy para que lo compartas con los demás.

Oh hijo mío, no dejes que tu corazón se distraiga con las glorias mundanas del enemigo que son ilusiones para engañar la mente y el alma, para engañar tu corazón."

Sí, mi Señor. "Dondequiera que os envíe, id en paz. Id en la paz de mi misericordia. Que tu corazón cante cada día un cántico nuevo para gloria de mi Padre y bien de mis hijos."